jueves, 30 de diciembre de 2010

¡Feliz Año Nuevo!



Qué poco queda para terminar este año... y para qué lo vamos a negar, ha sido uno de los mejores de nuestras vidas. Nos casamos, nos quedamos embarazadas, seguimos trabajando (en los tiempos que corren es una suerte), terminé la hipoteca (¡¡¡yuju!!!)... Algunas metas superadas.

El sábado pasado nos fuimos a Alicante como ya os dije. Un viaje relámpago y cansado pero mereció la pena, pudimos estar con la familia de Natalia. Y entre el cansancio del día de Nochebuena (toda la tarde en la cocina), dormir sólo 3 horas y las horas en el coche imaginaos cómo estábamos el sábado, echas un trapito. A la hora de irnos a la cama me quité las botas y ¡¡horror!! Tenía los pies como los de Dumbo, superhinchados. Era increíble como los tenía y las manos también se me pusieron igual. De echo aun los tengo así, sólo se ha bajado un poco la hinchazón pero siguen igual.

El sábado cumplimos las 32 semanas pero con el tema del viaje no me hice foto. Me la hice ayer, 32 semanas y 4 días, a ver qué os parece...

Sí, chicas, todo eso soy yo. Es increíble cómo estoy sabiendo que nos quedan casi 2 meses más de engorde. ¿Pero qué va a salir de ahí, madre mía? Espero que sólo sea un niño porque sitio hay como para llevar una banda de cornetas y tambores, por lo menos... Vale que el muchachote esté grandecito pero tampoco es para tanto.
El domingo me pesé en la báscula de mi cuñada... Ay, qué dolor me entró cuando vi que marcaba 83,200 kg, 19 kilos van ya. No tengo perdón de dior, lo reconozco.

Aunque sigo sintiéndome bien reconozco que me cuesta más moverme, siento pesadez en el pubis y he notado que estoy torpona perdida. Se me caen las cosas de las manos demasiadas veces, cada dos por tres tengo que agacharme a recoger algo del suelo. Ya no aguanto en cuclillas y para, por ejemplo, quitar el polvo de la parte baja de los muebles tengo que sentarme en el suelo. También me va costando más trabajo ponerme los calcetines y las botas, secarme los pies tras el baño o sacar la ropa en la lavadora. Y lo peor está por llegar...
Lo que sí me hace gracia es que ya siento sus hipos. ¡¡Síiiiii, ya los siento!! O por lo menos creo que es eso. Son como respingos suavecitos pero rítmicos, por eso pienso que es hipo.

La familia y amigos siguen con el consumismo. Otra vez le han comprado cosas al bichillo y he tenido que decirles: "¿Qué parte de NO LE COMPREIS MÁS COSAS AL NIÑO no habéis entendido?" Pero el personal no se da por aludido. Más bodies, una cazadora, camisas, zapatos, camisetas e incluso ya le han regalado su primer juego de menaje; platitos, cuenco, vaso y cubiertos para cuando empiece con las papillas. También un marco portafotos plateado muy chulo.
Miedo me da el día de Reyes del invierno que viene...

He mirado los papeles y la cartilla y hasta el 25 de Enero no tengo que volver a ver a la matrona y la última ecografía el día 28. No me cuadra mucho, desde el 9 de Diciembre que me hice una eco no tengo más revisiones que esas hasta el parto. Ni más análisis ni na de na. Por lo menos a mí no me han dicho nada ni me han mandado carta de nada. Creo recordar que al menos me queda una analítica más y otra de exsudados o algo así. Bueno, seguiremos esperando.

Bueno, ahora que ha dejado de llover un poco aprovecharé para hacer unas compras para mañana, que el cotillón lo celebraremos aquí en casa. Amigas, bebida, picoteo y la Wii. Ya me estoy imaginando el panorama, al menos el jartón de reir está asegurado.
Que tengais muy feliz entrada de año, que todos vuestros deseos se hagan realidad el año que viene y que cumpláis los propósitos que os marquéis.

¡¡Feliz Año Nuevo!!

viernes, 24 de diciembre de 2010

Feliz Navidad (o Saturnales, como querais).

Pues sí, he estado un poco perdida este mes pero tampoco es que hubiese nada nuevo que contar.
Aparte de las clases de educación maternal (y ya no regalan nada, jo) y una ecografía que me hicieron el día 9 (que tardaron menos de 10 minutos en hacerla y ni me dieron fotito porque Álvaro estaba mirando para el cóxis) no ha habido mucho más. Seguimos engordando (el bebito y yo), él sigue con sus pataleos y desde la semana 29 está girado. Ahora tiene los pies y las manos en la izquierda y la espalda a la derecha. Algunas veces saca la espalda y la barriga se me pone que parece la escena de "Alien" en la que le sale el bicho por la panza. El día 9 pesaba más de 1,600 kg, supongo que con los días que han pasado ya pasará de los 2 kilos. Y aún faltan dos meses... ohú...
Yo sigo con el poco dormir, me duele la espalda un montón por la noche y cada vez me cuesta más coger una postura cómoda. Ni con cojines ni con na de na. También sigo "bastante apretada"... vamos, que cada vez que voy al baño hago prácticas para el parto y no hay manera de solucionarlo. Me han recetado Plantaben pero no me hace nada, como fruta y verdura, bebo mucho líquido, intento comer cosas con fibra pero nada me hace efecto. Creo que es por los sobres de hierro que me estoy tomando pero no puedo dejarlos porque en el último análisis me salió el nivel de hierro muy bajo. Total, que ajo y agua, ya sabeis...

Las compras-bebé ya se pararon (por nuestra parte, porque los demás siguen en plan "ayquemonoparaÁlvaroytelocomproporquesí". Mi hermano me ha traído la cuna de la niña de un amigo suyo, una cosita que me ahorro. El carro ya está encargado, nos lo traerán a finales de Enero. Sólo nos queda la bañera (que la comprarán los compañeros de trabajo de Natalia).

Mañana sábado llegamos a la semana 32 pero la foto va a tener que esperar un poco. Esta noche después de cenar en casa de mis padres, casi de madrugada, nos iremos para Alicante. Aprovecharemos este año que cae las fiestas en fin de semana para ver a la familia de Natalia. El padre y la tía están pachuchetes y queremos estar allí aunque sea dia y medio. ¡Y ver al primito otra vez!

Y nada más, sólo desearos que paseis estas fiestas con mucho amor y alegría, dando muchos besos a los pequeñines, frotando las barriguitas de los que vendrán y cogiendo muchas fuerzas para los que serán engendrados dentro de poco.

Lo dicho, ¡¡¡¡Feliz Navidad!!!!