jueves, 26 de agosto de 2010

Yo es que no me aclaro.

No, de verdad que no, que me tienen toda liá.
Este lunes me llamó la matrona porque quería verme lo antes posible. Yo pensé que era por lo que había pasado la semana anterior, pero no. Me dijo que había que repetir los análisis de las cromosomopatías. Me entró el canguelo.

-Pero si el tocólogo me dijo que todo estaba bien y me dió los papeles de los resultados...
-Los de cromosomopatías no, tienes que repetirlo.
-¿Es que ha encontrado algo raro?
-Noooooo, que va, no te preocupes. Es que han llegado fuera de fecha y hay que hacerlos otra vez.
-(¿Eing?) ¿Fuera de fecha? ¿De verdad que no hay nada raro? Dígame la verdad, por favor...
-Que no, mujer, que no pasa nada, de verdad.
-Bueno, pues mañana a primera hora estoy ahí.

Análisis fuera de fecha. No sabía yo que caducaban, como los yogures.
Al día siguiente fui y me dijo lo mismo, incluso me enseñó el papel de laboratorio en el que ponía que se habían pasado de fecha. Llamó a Extracciones y le dijo a la ATS que le hiciera el favor de sacarme sangre, sin coger cita. Me dió el papel para la extracción y me preguntó cuando teníamos la próxima cita. Le dije que el día 2 y me contestó que bien, que para ese día ya estarían los resultados. Me saqué sangre y nada, a esperar. En la cartilla de embarazo me apuntó "Solicito análisis 2º trimestre".

Ayer estuvimos en el hospital para la revisión que nos mandó el ginecólogo, a la semana de darme de alta.
Entramos por urgencias y nos subieron a la tercera planta, paritorios y urgencias de ginecología. Cuando me tocó el turno me preguntó la ginecóloga a qué venía. Le dí el informe que me dió el ginecólogo de planta y me dijo que subiera al potro. Me exploró y me hizo una ecografía. La chica era más bien sosita, ni siquiera me giró el monitor para poder ver a Chicharito. Todo seguía bien, que siguiera una semana más de reposo y tomándome la temperatura por las tardes.

Ea, otra vez a estar tirada en el sofá, qué harta estoy... Cuando se hace por gusto está de lujo pero cuando hay que hacerlo por obligación cambia la cosa. Tengo la cintura molía y por las noches me despierto cada vez que tengo que cambiar de postura. No duermo y me levanto con el cuerpo entumecido. Qué hartura...
La ginecóloga me ha dicho que puedo irme a Alicante, sin conducir yo, claro. Por lo menos cambiaré de aires y podré conocer a Javier, nuestro sobrinito. Espero que Natalia me lleve a la playa y no me tenga todo el día en el sofá, aunque sea para darme un bañito cortito. O meterme en la piscina del chalet para refrescarme. Seguro que habrá enfados, como si no la conociera...

Esperaremos al día 2 a ver qué pasa con esos análisis, no creáis que no me han dejado preocupada. Le doy vueltas a la cabeza y me imagino de todo, sobre todo malo. ¿Y si me toca a mí algún problema? ¿Por qué no me lo podrían haber dicho antes?... Y mil cosas más.
Sólo pido a los cielos que Chicharito esté bien, que nazca sanito y sin ningún problema. Daría lo que fuese por saberlo con certeza.

jueves, 19 de agosto de 2010

VAYA PEDAZO DE SUSTO GORDO.

Hola, chicas, ¿cómo os va?

Antes de contaros nada quisiera contestar el comentario que me ha dejado marisa.per, que no puedo contestarte por correo porque no lo tiene puesto en su perfil.
El tratamiento lo hemos hecho todo por el SAS (Servicio Andaluz de Salud), no hemos tenido que pagar nada, ni medicinas, ni siquiera la muestra del donante porque en Andalucía tenemos banco de semen del SAS. Y precísamente está en Granada.
Así que si te animas supongo que tu tratamiento será el mismo que el mío, ya que somos de la misma comunidad. Y no hay tanta cola como dicen, a nosotras nos llamaron para comenzar el tratamiento a los 6 meses de haber pedido el volante para la Unidad de Reproducción (y eso que nos pilló el verano en medio y cierran en Julio y Agosto).

Y a Zi, ¿para cuándo un blog contando vuestras cositas con el bebé? Jeje, es bromita, chicas, pero es verdad que aunque no se os dé muy bien (como a mí), cuando coges carrerilla siempre hay algo que contar. La prueba esa que dices me la hicieron ya, me sacaron mil botes de sangre y el viernes me hice la ecografía para buscar defectos físicos, y todo bien.

Bueno, y paso a contaros lo que ocurrió el sábado por la noche.

ADVERTENCIA: Si sois sensibles y encima estais embarazadas mejor no lo leais, puede haceros pasar un mal rato sin necesidad.

¿Recordais el post anterior, contado lo bien que iba todo? Bueno, pues horas después salí de trabajar, a las 7 de la tarde. Fui a casa a ducharme, hicimos unas compras y a las 8 y media estábamos ya en casa de mi hermano. Cenamos, reimos, le cantamos cumpleaños feliz a mi hermano el pequeño (que tiene 20 años y 1,90 de alto, pero siempre será "el niño") y llegó la hora de las copitas. Yo me abstuve, claro, pero a los demás no les dió tiempo ni terminar la primera. Estaba sentada y empecé a notarme como me bajaba lo que yo creí flujo. Pensé "juer, mejor voy al baño y me limpio un poco porque noto que es bastante". Y así hice, pero para mi sorpresa, cuando me bajé las bragas las tenía empapadas de sangre (pero algo más clara, como mezclada con otro líquido). Me puse blanca, y lo primero que me salió del cuerpo fue gritar: "¡Natalia, llévame a urgencias!". Las primeras que saltaron de la silla fueron mi madre y Natalia, que habían estado pendientes de mi ida al baño y los demás vinieron detrás al ver sus caras. Nos pusimos nerviosos, mi hermano y cuñada se vistieron en un segundo y nos metimos en el coche a toda pastilla, camino del Hospital del Valme. Mi padre y el pequeño se fueron a casa, de todas formas no podrían hacer mucho en el hospital, sólo dejan que pase un familiar con el enfermo.
Llegamos a urgencias y casi no tuvimos que esperar, a los 10 minutos ya me estaban llevando a la zona de paritorios, que allí atienden las urgencias de ginecología. La doctora me preguntó qué había pasado y tras ello me dijo que me desnudara de cintura para abajo y me subiera en el potro. Cuando me bajé la ropa comprobé que la compresa que me había dado mi cuñada estaba casi llena. Ya en el potro lo primero fue meterme el espéculo, con el consiguiente dolor por mi parte. Comprobó que el sangrado venía del útero. Después metió dos dedos (esto no sé para qué fue), siguió una ecografía vaginal y otra por fuera. Me dijo que el niño seguía bien, que tenía latido. Me vestí y me dijo que esperara fuera un rato para ver si seguía sangrando o si se cortaba. A los 15 minutos de estar fuera llamé a la puerta porque notaba cómo me bajaba la sangre, en pequeños chorros. Volví a desnudarme y ya tenía la compresa totalmente empapada, me estaba manchando hasta el pantalón. Otra vez al potro y otra vez el mismo reconocimiento. Me tomaron muestra del sangrado y dijeron que tenía restos de líquido amniótico. Me cuando bajé del potro había dejado una mancha en las sábanas del potro del tamaño de una mano. Tras esperar otro rato en un sillón de allí dentro me hicieron pasar otra vez a la consulta, a darme el diagnóstico: Rotura del saco amniótico. Yo, que no había parado de llorar desde que salí de casa de mi hermano imaginaos cómo me puse cuando me dijo la doctora que con el poco tiempo de embarazo que tenía el feto no tiene posibilidad de seguir adelante, que aun no está totalmente formado. Que, aunque esté sano y con latido, quedarse sin líquido lo haría morir. Que quizás si hubiese estado de al menos 20 semanas habría posibilidades pero con tan poco tiempo... Llamó a Natalia para que pasara a consulta y le explicó lo que había. Natalia se echó a llorar también, era para menos. Se fue a solicitar cama en planta para ingresarme y allí nos dejó a las dos llorando como dos magdalenas desconsoladas. No os podeis imaginar cómo nos sentíamos, después de tantas ilusiones, de tan bien que estaba saliendo todo, y esto de buenas a primeras. A las 3 de la mañana estábamos en la planta, con la habitación asignada. Es la zona donde están todas las recien paridas y las que iban como yo, com problemas. Esperando en enfermería a que me indicaran el número de habitación escuché llorar a algún bebé y volví a echarme a llorar. ¿Por qué mi pequeño tenía que irse, si estaba bien?
Instalada ya en la habitación me pusieron suero y me dijeron que tenía dieta absoluta, por si llegaba la hora de hacerme un legrado, que no me levantase de la cama nada más que para ir al baño y que no me sentara, siempre tumbada. Pasamos lo que quedaba de noche casi sin sueño, a las 6 me pusieron un goteo de antibióticos y desde ahí no volví a cerrar los ojos. A la mañana siguiente fui al baño y vi que no sangraba con la abundancia de la noche anterior. Pasaron consulta a las 12 o así, y me mandaron abajo otra vez para hacerme una ecografía. El bebé seguía con latido y con líquido suficiente. El sangrado seguía mínimo y sólo sangre. Decidieron darme de comer, porque si seguía bien no me harían nada. Supongo que querían esperar a que no hubiese latido para intervenir.
El lunes igual, pase de consulta y nueva ecografía. El bebé bien y líquido normal. El martes, cuando pasó el médico, me dijo que si seguía con el poco sangrado y el bebé estaba bien me daría de alta al día siguiente. Le pregunté que si la bolsa podría haberse cerrado y me dijo que si hubiese estado rota hubiese perdido todo el líquido. Puse cara de "¿eing?" y le dije que en urgencias me habían dicho que la bolsa estaba rota, que me analizaron el sangrado y había dado positivo de líquido amniótico. Me dijo que sería otra cosa, que si se hubiese roto no hay manera de regenerarla y que se hubiese vaciado, y que el análisis podría estar equivocado porque la sangre engaña en los resultados. Yo, como no entiendo de esas cosas, pues me callé, normal. Me hizo otra ecografía en la misma planta (pude ir andando) y vimos al bebé muy bien. Me explicó: "Esto oscuro que ves aquí alrededor del feto es líquido amniótico y para mi opinión es normal, hay suficiente". Ví a Chicharito con más detenimiento, cómo se movía, incluso en dos ocasiones pudimos verle toda la columna vertebral con sus costillitas y todo. "Todo está muy bien, si sigue así puedes irte mañana a casa".
Cuando volví a la habitación se lo conté a Natalia. El descanso que nos entró fue como si nos hubiesen quitado una montaña de encima.
Ayer miércoles volvió a verme el mismo médico y lo mismo, todo muy bien, los análisis bien y otra ecografía. Vimos al pequeñín otra vez y me dijo el médico: "Hay que ver lo que se mueve este niño". Y es verdad, ahí estaba dando patadas y manotazos como diciendo "¿qué es esto de tanto movimiento últimamente? Dejadme tranquilo/a ya, leches". Y a las dos de la tarde me trajeron la carta de alta, con el tratamiento e indicaciones a seguir. Debo guardar reposo relativo. Vamos, del sofa a la cama, de la cama al baño y poco más. Que siga tomando los antibióticos y que vaya a los siete días a urgencias de ginecología para una revisión. De trabajar que me vaya olvidando, ya tengo la baja por la seguridad social. A las 20 semanas me daré de baja por la mutua.
¿El motivo del riesgo de aborto? Ni idea y creo que los médicos tampoco tienen ni idea porque no me han dicho nada en claro. Según mi cuñada (la hermana de Natalia, la ginecóloga), hay veces que se produce sin saber el motivo. Y me tiene que tocar a mí, vaya cenizo que tengo...

Después del susto que nos hemos llevado podemos decir que si antes estábamos ilusionadas con Chicharito pues imaginaos ahora, estamos aun más pendiente de él/ella que antes. Hemos pasado por el trance que creer que nuestro pequeñín se nos iba, y peor sabiendo que él/ella está sanito/a. Porque si te dicen que tiene alguna enfermedad o malformación pues te haces a la idea pero sabiendo que está bien... es un trago que te digan que se va estando bien. Nuestro pequeñín nos ha demostrado que va a ser un/a luchador/a desde pequeño/a, que va a tener unos huevos u ovarios bien puestos.
También debo decir que Natalia se ha portado como una gran esposa y madre, nos ha cuidado de tal manera que no se ha separado de nosotros en ningún momento. Sólo nos dejó unas horas para arreglar papeleo de la baja, ducharse y poco más. Me ha dado de comer, me ha lavado, no ha dejado que me mueva lo más mínimo. También me ha dicho que no va a inseminarse por lo menos hasta que yo no esté perfectamente bien, que quiere estar fuerte en todo momento para cuidarnos y que si tiene un embarazo malo no podría. Va a renunciar a su embarazo por el mío, por lo menos de momento, y yo sé las ganas que tiene de estar embarazada. Cada día me doy más cuenta la suerte que tengo que haberla encontrado, de habernos enamorado y compartir nuestras vidas, es la mejor. Neni, desde aquí también quiero decirte lo mucho que te quiero, aunque sabes que te lo digo mil veces al día. Que te mereces este amor y mucho más, que deseo pasar todos los días de mi vida contigo.

Y aquí seguimos Chicharito y yo, espanzurrados en el sofá con el portátil en una bandeja con patas. Esto es lo que nos queda en bastante tiempo, incluso podría ser los 6 meses que nos quedan. Va a ser aburrido a más no poder y ya me está doliendo la espalda de tanta cama y tanto sofá. Me voy a desesperar de no poder hacer nada y que Natalia tenga que cargarse todo el trabajo. Odio sentirme tan inútil pero tengo que aguantarme por nuestro chiquitín.

Muchos besos, mamis, seguiremos por aquí y espero que en adelante sólo os demos buenas noticias. Si alguna mami con pancita ha dedidido leer el post decirle que no piensen cosas raras, que esto no va a pasarle a ninguna, van a estar todas muy bien y van a tener unos bebitos preciosos ¿ok? No vayais a rallaros, por favor, lo mío sólo ha sido mala suerte.

¡Abrazos, chicas!

sábado, 14 de agosto de 2010

Tocólogo.





No tengo término medio, o no escribo nunca o escribo todos los días...

Ayer estuvimos en el tocóloco, para los resultados de los análisis y ecografía. Todo bien, menos el análisis de orina que me han sacado los nitritos altos. Ni idea de lo que son, pero sí había notado que el pis me olía un poco raro. Nada, unas pastillas cada 6 horas durante 7 días y un cultivo a las 2 semanas, para comprobar que haya desaparecido.
Pasamos al ecógrafo y vimos a nuestro bebé otra vez. ¡Ya está hecho/a una personita de 6'5 centímetros! Al tocólogo le costó trabajo hacerle fotos, no terminaba de verlo bien.
Una pregunta, chicas, ¿os ha molestado o dolido cuando os han hecho alguna ecografía? Porque a mí sí y se lo dije al médico. Me contestó que es normal, que claro que molesta pero había algunos momentos en que casi le doy un manotazo del dolor que me daba. Y según él es normal. Po vale, hijo, lo que tú digas.
Terminó y nos dijo que todo seguía muy bien, que va perfecto. Nos dió unos cuantos papeles: uno que te orienta de las fechas de las siguientes citas y dónde son, otro con lo del cultivo, los resultados de los análisis y dos fotos de la ecografía.
Cuando vimos las ecografías al salir de la consulta nos hartamos de reir. ¿Que por qué? Pues vedlo vosotras mismas.



¡Nuestro bebé es un alien! Y parece que nos está saludando con un brazo en alto como diciendo: "Saludos, terrícolas". Ains, pero es nuestro alien chiquitín, mirad qué guapo/a. Mientras no le salgan antenas...

Nos fuimos a comer a casa de mi madre, para enseñarle a mi familia las fotos del chiquitín. Y a mi madre se le cae la baba... vereis cuando ya pueda tenerlo en sus brazos, me la veo llorando de la emoción. Cada vez que me ve lo primero que hace es acariciarme la barriga.
Mientras se hacía la comida nos pusimos a charlar sobre las cositas que habrá que comprarle y me dijo que había rebuscado en los armarios y que había sacado cositas de cuando éramos pequeños. Qué apañá es mi madre, tiene cosas guardadas de hace 36 años, no veas... incluso me dijo que alguna cosa tenía guardada de cuando mi padre era un bebé. Y acaba de cumplir 62 años... Qué buena mujer pa un pobre, por dior.
El caso es que trajo al salón parte de lo que había sacado. Por lo menos 10 o 12 juegos de sábanas para la cunita y el cochecito, una manta para cuna, el batón de mi hermano el pequeño (que cumplió 20 años el jueves), una almohadita, un protector de colchón, hasta una mochilita que le dieron en una reunión del Mercadona con pañalitos, toallitas y cosas de esas. Ya os digo, mira que le gusta guardar las cosas.
Y para qué negarlo, me va a venir de lujo y encima me da ternura que nuestros bebés usen las mismas cositas que usó su mamá cuando pequeña. Y recordé un trajecito de lana hecho a mano que me hizo una vecina cuando tenía yo 6 meses. Era precioso, en rosita, pero me dijo mi madre que cuando se me quedó pequeño esa misma mujer se lo pidió para su nieta. Qué pena, porque era monísimo. Mirad que bien me sentaba:


Ese mismo día me hicieron otra foto en pelotillas y estoy toda sonriente y más guapa que aquí pero creo que como está la cosa hoy día mejor no poner fotos de niñas en cueritos, por si las moscas. Aunque sea de la edad de la polka. Mi neni dice que quiere una nena como la de la foto. Lo malo es que con el tiempo se va perdiendo la monería, snif snif... Qué pena, hija, cómo se estropea una...

Pues nada, ésta es la crónica de ayer, me alegro de daros estas buenas noticias. La barriguita va viento en popa y creciendo a todo trapo. Fíjate si crece que en un mes he puesto 1'2 kilos... verás la matrona, seguro que me riñe el día 2.

Besitos, chicas, y las que esteis o cojais vacaciones que disfruteis mucho.

martes, 10 de agosto de 2010

Espejos.

Sí, chicas, eso debería hacer yo de vez en cuando: mirarme un poco mejor en el espejo.
¿Recordais que en el post anterior os decía que no había mucha diferencia entre la foto de las 8 semanas y como estoy ahora? Pues juzgad vosotras mismas... 12 semanas + 3 días.




Se ve que como me veo todos los días pues no noto la diferencia... Y un cuerno, como si no notara que no me cabe nada de ropa. Esos pantalones que veis en la foto me los compré hace mes y medio o así, porque ya no me cabía nada. Me los compré grandecitos "para que me dure un tiempo antes de comprarme los de premamá"... Una talla 46 y me han durado mes y medio, es la monda... No me están pequeños pero ya no me sobra nada.
Pensareis que me estoy obsesionando un poco con las tallas y eso pero no van por ahí los tiros. El tema es que paso de gastarme un dineral en ropa que después de dos meses ya no pueda ponerme y tenga que comprar más ropa después. Y que siga quedándoseme pequeña. Al final terminaré comprando ya ropa de premamá, por lo menos no se me quedará pequeña en un mes.

Pues seguimos con gastos. Ahora estamos buscando coche de segunda mano, para comprarlo. El finde que se fue Natalia a Alicante a conocer al sobrinito el coche le dejó tirada a la vuelta, a la altura de Murcia. Grúa, taxi a Sevilla, mareo para que llevasen el coche a Alicante y lo arreglaran allí, que está su familia para poder recogerlo. ¡Y encima el mecánico no le encuentra nada! ¡El muy puñetero la deja tirada y encima no tiene ná! Vamos, el despiporre.
Así que, como ya no me fío de él pues le dije a la niña que comprásemos otro y ya puestas pues buscar un monovolumen. Sí, hijas, sí, el coche de las familias con hijos. Ya hemos "pasado de segmento", como dirían en el concesionario. Y ahí andamos mirando por internet, a ver qué encontramos.

El domingo me asusté un poquito. Iba a ducharme y al quitarme las braguis veo que tengo restos de flujo pero oscuro. Me quedé blanca, porque no lo ví normal. Cogí un poco de papel higiénico y comprobé si seguía soltando aquello. Nada, todo blanco. Decidí que si se repetía me iría a urgencias pero no ha vuelto a pasarme. No sé que sería pero me dejó preocupada. Y como el viernes tengo la ecografía pues ya veremos si todo sigue bien. Eso espero.

El tema del sueño... no hay manera. Arrastro un sueño que no veais, no termino de coger la postura y encima, el día que duermo en casa por la noche, me despierto un montón de veces. No consigo dormir más de 5 horas seguidas y eso con suerte. Y cuando me toca dormir de día pues imaginaroslo... menos aun, sólo duermo a trompicones. Entre los gritos de la gente, los coches con los claxons y la música a todo trapo, la música o los ladridos de los perros de los vecinos y que parece que les cuesta más hablar que gritar... ¡Quiero una casa en medio del campoooooooo! Porque conseguir que la gente sea más civilizada...

Hoy me está saliendo un post tipo hoja de reclamaciones, no hago más que quejarme. Es que entre el calor, el poco sueño, el chorro de horas que tengo que trabajar este mes y que no puedo estar con mi mujer nada de tiempo me está poniendo tela de irritable. Estoy deseando que llegue septiembre para poder descansar un poco, noto que lo necesito. Y como estamos pensando en la compra del coche pues la semana en la playa que estaba preparando en plan relax... ¡a la porra! Otra vez me veo en Alicante en plan okupa en casa de mis suegros.

Si es que no pué sé...

miércoles, 4 de agosto de 2010

Soy una descastá.

Que sí, que actualizo poco, lo sé. He pasado un mes un poco desganada de todo y encima, como todos los años al llegar el verano, trabajo más horas. Se me va a poner cara de lechuza.

No es que tenga mucho que contar, mi vida sigue tan rutinaria como siempre, es lo que tiene tener poco tiempo libre y trabajar de noche. Con deciros que sólo he pisado la playa un rato en el mes de Junio. Uuuuhhh, que vida más marchosa y a tope llevo... En fin...

¡Ya somos titas! Javier nació el día 24 de Julio y es una monadaaaaaaaaaaaa. Natalia fue a verlo el finde pasado (yo no, que tenía que trabajar... pa variar) y le ha hecho muchas fotitos y vídeos. Se parece a su madre un montón y tiene unos hoyuelos en los cachetes para comérselos. Y la barbilla rajada, como Kirk Douglas, jeje. Eso sí, duerme como una marmota, hay que hacer malabares para tenerlo despierto para darle de comer, bañarlo, vestirlo... Qué lindo es, tengo ganas de que llegue Septiembre para ir a verlo, acunarlo, darle el bibe... Ainsss, qué tienno.


Hablando de bebés, ¿ha nacido Erik ya? Me he pasado varias veces por el blog de Silvia y Eva a ver si ponían algo, supongo que no actualizar es señal de que no pueden y el motivo será que Erik ya decidió salir. Enhorabuena, mamis, esperaremos a que nos deis gratas noticias.

Y siguiendo con bebés, Chicharito sigue ahí sin dar señales de ninguna clase, ojalá que cuando nazca sea tan bueno como ahora, que a veces dudo que esté embarazada y todo. Y dejo de dudar cuando me pongo los pantalones del uniforme y veo como cada vez me están más pequeños.
Ya fuí a la empresa para comunicarles mi futura maternidad y he empezado a mover papeles para que más a delante me den la baja. Según me han dicho lo más probable es que me la den a las 20 semanas. Podría haber pedido la baja desde primera hora pero ya que mi puesto no es demasiado malo pues aguantaré un poco en activo.
Pedí pantalones nuevos... adivinad... una 46. Cada vez que los cojo parece que no son ni míos y aunque de cintura me están bien (lógicamente) de lo demás me hacen más bolsas que en el Carrefour. Me quedan horribles. Bueno, para estar sola qué más me da y tampoco vengo al trabajo a pasar modelos.

Pues ya estoy de 11+3, este sábado toca foto cuatrisemanal. No creais que hay mucha diferencia con la que me hice a las 8 semanas, ya lo vereis.
¿Cómo? ¿Que no puse foto de las 8 semanas? Ups, se me olvidó...
Bueno, la pongo ahora.

Sí, se me ve un barrigón que no veais pero en mi defensa diré que nos habíamos puesto púas de comer. Ese sábado fuimos a celebrar nuestros 4 años juntas y nos dimos un homenaje. Fuimos a cenar a un restaurante que nos gusta mucho, San Marcos, en concreto el de la calle Cuna (muy propio el nombre de la calle, jaja).
Lo blanco que se ve debajo de mi barriga no son las bragas, que os veo venir. Es el bolsillo del pantalón, que me lo abrí para que se viese mejor la panza.

Pues ya queda menos para la próxima revisión será el viernes 13, vaya día. Menos mal que una no es supersticiosa.

Y poco más que contaros, sólo que Natalia sigue esperando a que vuelvan a abrir la consulta de reproducción para empezar de nuevo. Pobrecita mi niña, otra vez a pasar por todo el tratamiento. Cuando vayamos de nuevo al hospital tengo que pedir el documento que acredite que mi embarazo ha sido por inseminación de donante anónimo, para el día que vayamos al juzgado para hacer la prefiliación. Por un lado no me cuesta trabajo pedirlo ni a los del hospital que me lo den pero me da rabia tener que pedir un papel así. Si fuésemos una pareja hetero no nos pedirían nada, ni siquiera estar casadas. Igualdad... y un cuerno.

Ah se me olvidaba, nos han hecho una entrevista para una revista online, Lespensantes. ¿Habéis visto qué nivel, niñas? Oich, dentro de nada a la tele, jajaja. No, ya en serio, una de las colaboradoras de la revista es amiga nuestra y nos pidió si podía hacérnosla. Con mucho gusto, por supuesto, para Dafne todo lo que ella quiera y más, que es de las mejores personas que conozco. Aún no ha sido publicada pero podéis leerla ya en el blog de Dafne García, Actualidad Lésbica. Es un blog de reciente creación pero disfrutareis mucho con él, os lo recomiendo.

Y nada más por hoy, espero que después de este parón vuelva a tener más ganas de actualizar, que no quiero que esto críe polvo.

¡Besos a todas!