¿Somos las primeras?

Esta tarde estuve en Punto Visible, hablando con Maribel. No puedo decir que haya salido con la duda resuelta porque efectivamente somos el primer caso de estas caresterísticas que se le presenta. ¿Ninguna pareja le ha dado por parir las dos? Creo que sí, de hecho hay un blog de una pareja que van a ser mamás de esta forma (a las autoras, si quereis que ponga el enlace, avisad), pero por la privada, si no me equivoco. Nosotras, como somos Las Supertacañonas (las que tengais menos de 30 años no sabreis quienes eran) pues lo queremos hacer todo por la SS. En serio, ya no es por el dinero (gracias a Dior no estamos tan mal), es porque si pagamos la SS es para algo, ¿no? Jolín, que he ido al médico veces contadas en mi vida, y en casi 20 años de trabajo sólo me he dado de baja 3 meses (un accidente de coche y una gastrointeritis a lo bestia). Ya es hora que amortice algo ¿no os parece? Como me ha dicho Maribel, si fuesemos una pareja hetero que los dos tienen problemas nos atenderían a los dos ¿por qué a nosotras no? Bueno, lo dejo ya porque me ofusco...

Seguiremos con las averiguaciones, que aunque faltan meses para empezar con todo es mejor dejarlo todo atado y bien atado, como dijo aquél.

Averiguaciones.

Un post rapidito para contaros novedades. Pocas, ya que con el trajín que llevo últimamente es que no paro un rato.

Hemos investigado un poco por ahí sobre el tema que os comenté en el post anterior. Con los comentarios que habeis dejado en el blog (gracias, chicas), en otras páginas y llamadas de teléfono pues algo ya sabemos pero nos falta concretar. He llamado a Punto Visible y he pedido una cita para el día 9. Me atenderá Maribel, que si no me equivoco es la Vicepresidenta de la Asociación Defrente.
Espero que ella me oriente mejor aunque ya me dijo por teléfono que es el primer caso que se le dá. Si el tratamiento podemos realizarlo las dos por la SS le pediré que me lo dé por escrito para ir sobre seguro y que no nos pongan pegas. Y si no es así... pues a ahorrar se dijo y una de nosotras a la privada.

Y cambiando de tema. Le dije a N. que escribía en el blog usando sólo la inicial de nuestros nombres y le pregunté si quería que lo pusiera entero. Me dijo que sí, que qué más dá y tiene razón. No sé por qué empecé a usar las iniciales ya que todo el mundo sabe que somos pareja, que nos casamos en unos meses y que seremos madres cuando Dior quiera.
Pues nada, paso a resolver el enigma, jajaja. Yo soy Mar y mi pareja es Natalia, de ahí el nombre del perfil del blog, Nayma.

Bueno, ya os contaré que me dicen el miércoles, espero daros buenas noticias. Porque el otro día, en un ratito que tenía libre en casa, me puse a ojear los últimos papeles que nos dieron en el hospital, las autorizaciones esas. Y otro chasco más, no eran las autorizaciones para reconocer al bebe de una y la otra, son para autorizar a hacer la intervención, como cualquier operación de hospital. Si es que no gana una para disgustos...

Un poco desanimadas.

Sí, desanimadas por la última visita al hospital.

Como ya os dije teníamos cita el día 26 de este mes para recoger los resultados de los análisis que nos hicimos hace un mes mas o menos. Llegamos a la sala de espera y mientras entraba y salía gente de la consulta nos fijamos que dentro había más personal de la cuenta, mucha bata blanca por ahí dentro. Pensamos "será que la ginecóloga tiene a estudiantes dentro, de prácticas" pero me extrañó porque ese hospital no tiene Facultad de Medicina, sólo el Virgen Macarena. Bueno pues cuando nos llegó la hora entramos y nos encontramos con dos doctores, un chico y una chica, no estaba la anterior ginecóloga. Son bastante jóvenes así que supuse que uno sería médico aunque de poco tiempo y la otra chica, que era aun más jóven, sería una residente.
Empezaron con los resultados de N. Le dijeron que los análisis eran normales pero que tenía una de las trompas obstruida. Primera decepción. Recordé que N. me dijo que cuando fue a hacerse la radiografía con contraste no le habían dicho que la tuviese.
Después empezó con los míos. Todo bien, sin enfermedades pero me dijo que, por mi edad, los niveles los tenía un poco bajos pero aun así estaban bien para el tratamiento.

Nos ha recetado anticonceptivos, a las dos. Para N. es normal que lo hagan ya que con el problema de la endiometrosis debe regularse para saber cuando se pone con la regla. Lo que no entiendo es por qué me los ha recetado a mí. Le dije que tengo una regla normal y muy regular, siempre sé cuando me toca y no falla pero nada, que me lo debo tomar un mes antes de empezar con todo. Les dijimos que cuánto tiempo tarda en empezar todo el proceso, ya que no queremos inseminarnos hasta casarnos, en Mayo. El ginecólogo puso una cara de "¿y para eso vienes ya?" pero la enfermera que estaba allí nos dijo que podíamos pedir cita para cuando ya hubiésemos salido de la boda y el viaje.

También nos dijeron que empezaremos el tratamiento pero que debían consultar la ley de reproducción porque "había unas lagunas" que no estaban claras. Le pregunté a la chica que qué lagunas eran esas. Me dijo que debían consultar si es legal que las dos nos inseminaramos. Le dije que claro que sí, que es legal pero me contestó que ya que somos pareja y futuro matrimonio no sabía si legalmente podíamos inseminarnos las dos. Le dije que sí que lo era, que no había problemas. En ese momento pensé en decirle "si quieres te traigo la ley de reproducción actualizada e impresa, para que la consultes" pero me callé porque me dejó en la duda. Nos dió unos papeles para que nos lo llevásemos y los firmaramos, que debemos entregarlo en la próxima cita. Son las autorizaciones para reconocer que somos pareja y que cada una está conforme con la inseminación de la otra.

Y salimos del hospital tristonas, decaídas por las noticias. Entre los problemillas físicos, que aunque no son graves sí hay que tenerlos en cuenta, y lo de la "legalidad" nos dió un bajoncillo. N. andaba de camino al coche sin decir palabra y yo venga a darle vueltas a lo de la ley.

Tenía entendido que en nuestros casos no había problemas en la asistencia para la reproducción, aunque fuesemos las dos las que queremos embarazarnos. ¿Vosotras lo sabeis? ¿Seguro que viene contemplado en la ley? Voy a leermela de nuevo y más detenidamente, a ver si me aclaro. Si no lo tengo claro iré a alguna asociación de gays y lesbianas en Sevilla, a ver qué me dicen.

Pasará...?

Hola de nuevo.

La operación de mi madre ya pasó y con buenos resultados, menos mal. Está teniendo una recuperación muy buena, ya que la intervención fue por videolaparoscopia, no tuvieron que rajar mucho. Espero que dentro de poco esté totalmente recuperada.

Ahora soy yo la que está de bajona, no sé por qué. No es nuevo, lo noto desde hace unos meses y lo achacaba a los nervios de la operación pero ahora no sé que me pasa. No tengo ganas de nada, me entristezco o enfado con facilidad, pienso que todo se me vuelve del revés y que nada merece la pena. Es una sensación de "¿para qué todo esto?". Y el colmo es cuando me pongo a pensar que si de verdad le importo a alguien, que no recibo apoyo o comprensión de nadie.

No se si soy carne de diván, quizás debería tener tiempo para mí sola, mimarme un poco pero en estos momentos debo atender a mi madre y su casa. Y también a mi abuela, que está muy mayor y era mi madre la que la atendía, ahora me toca a mí. Y el trabajo. No me queda tiempo para atender a mi casa y a N. le han vuelto los dolores de espalda, con lo cual ella tampoco puede hacer mucho.

De nada me sirve saber o que me digan que tengo dos ovarios para llevarlo todo, que siempre he tenido narices para enfrentarme a cualquier cosa o que soy fuerte. Estoy cansada de tirar del carro yo sola, necesito que me ayuden a tirar. Quizás también me conformaría con un abrazo que me hiciese sentir que no estoy sola. Pero el abrazo no llega. Cada vez lo siento más lejano y que algo se está derrumbando.

Sí, sé que esto no tiene nada que ver con un blog sobre maternidad pero necesitaba sacarlo fuera esta noche, la pena me estaba ahogando. Aunque tras airearlo por aquí vuelva a meterlo todo dentro, a seguir mascándolo.

Siento este post de mal rollo, en estos momentos no doy para más.

Una sonrisa en momentos delicados.

Pues sí, ya estaba haciendo falta ver un poco de alegría por casa.
Os cuento. Mi madre está pasando un momento bastante delicado, tiene a la vuelta de la esquina una operación muy importante que la tiene que no vive. Nosotros (toda la familia) le decimos que no se preocupe, que todo va a salir muy bien, que la cirugía ha avanzado mucho, bla bla bla... Pero para nuestros adentros sabemos que es una operación importante y que hasta que no llegue el momento y miren dentro no sabemos hasta qué punto es posible una buena recuperación. Pues así andamos en estos momentos, con las "carnes abiertas" por saber como saldrá todo.

El jueves llamé a mi madre y le pregunté si podía venir el viernes con nosotras a Sevilla a un mandaíto. Nos dijo que sí y (típico de mi madre) sin preguntar para qué. Si algo tiene mi madre es el don de la discrección. La recogimos por la mañana y allá que nos fuimos. Por el camino charlábamos y charlábamos y mi madre sin preguntar nada. Cuando ya casi llegábamos le dije que si no iba a preguntar dónde íbamos. Me dijo que se lo imaginaba (típico también, qué larga es...).
Entramos en la tienda de ropa. En este local saludamos a los dueños y nos pusimos a ver ropa. Ha adelgazado bastante y tiene poca ropa que le venga bien así que ahí que se puso a mirar. Cuando la dueña nos pudo atender nos dijo "ea, vamos a la otra tienda". Puso cara rara pero nos siguió sin decir nada. Al llegar a la otra tienda y ver el escaparate se le iluminó la cara. Tenían un traje de novia precioso en el escaparate. "Oys, qué traje más bonito", dijo. Pero cuando la mujer sacó otro traje que tenía guardado y me dijo que me lo probara su cara cambió. Por supuesto, a N. le dije que se fuese a tomar un café, que no podía verme con el traje puesto. Me lo puse y cuando mi madre me vió con el traje de novia casi se echa a llorar. Sólo sabía decir "estás preciosa, estás preciosa..." con los ojos vidriosos. Le dije qué que tal me sentaba y me dijo que muy bien, que es un traje precioso. Le solté "anda, tú que creías que tu niña no se iba a casar nunca, ¿eh?". La dueña de la tienda diciendo "ay, hija, qué bien te sienta, es que con ese tipito...". Y (orgullo de madre) "sí, siempre ha tenido muy buen tipo y aún lo tiene". Y yo pensando que les iría bien vender cupones de la ONCE, por cegatas. Pues anda que cuando vea a N. con su traje... una de dos, o yo les pareceré un guiñapo o llamarán a pasarela Cibeles a pedir trabajo para ella, la diferencia se nota.

Quizás pueda parecer un momento ñoño pero, como ya os he dicho, en estos momentos una alegría aunque sea tonta le hace mucho bien. Si os digo la verdad, el hecho de tener hijos me hace ilusión pero más aún me la hace pensar que mis padres tendrán por fin esos nietos que tanto desean, sobre todo mi madre, que le encantan los niños. Cuando la veía con un bebé en brazos, jugando y comiéndoselo a besos pensaba si algún día podría darle yo esa alegría. Ahora sí lo sé, ya queda menos.

Por cierto, el padre de N. también ha pasado por una operación parecida hace dos semanas y ya se encuentra en casa. Gracias a Dior que todo ha salido muy bien y se está recuperando rápido. Da la casualidad que los dos (mi madre y su padre) cumplen años el mismo día, el 27 de Enero. Ojalá que llegue esa fecha estando los dos totalmente recuperados y podamos celebrarlo con más motivos de alegría.

Ups, qué poco escribo...

Sí, lo sé, soy un desastre y no actualizo lo que debiera. Entre las vacaciones, después el trabajo, pintar el piso y males que hay por la familia tengo el blog con dos dedos de polvo. Y no es que haya mucho que contar, nuestra vida últimamente es bastante rutinaria.

Bueno, por lo menos poneros al día sobre el camino hacia los bebitos. Fuimos al Hospital de Valme el día indicado, y ya nos dimos cuenta que la que nos dió la cita no tiene mucha idea de dónde están las consultas pues era la B-14. Pues allí que entramos nerviositas perdidas. Creo que de camino a un quirófano no lo hubiésemos estado más. Nos recibe la ginecóloga y allí que empieza a hacernos preguntas. Nos pregunta quién es la que se va a embarazar y le soltamos "pues las dos". No se extrañó mucho y le dice a la enfermera "¿Ves? Te dije que querían las dos". Nuestra ginecóloga es chachi, es médico y pitonisa.

Nos hizo la historia a las dos, con las preguntas de rigor: que si tenía o he sufrido alguna enfermedad u operación, que si hay enfermedades en la familia, los hábitos (maldito tabaco...) y esas cosas. No tengo ni he tenido nada nunca, soy más sana que una pera, sólo tengo rachas en las que tengo el hierro por los suelos. Tras esto me dice que pase tras las cortinas, me desnude de cintura para abajo y me ponga la bata. Y llega el momento chungo, el dichoso "pato". Os vais a reir pero el pato y yo no nos llevamos muy bien y le dije a la enfermera si podía traerme uno virginal, que el otro me duele horrores. Menos mal que tenían. Me explora y lo encuentra todo normal. Sacó el "patito" y me hace una ecografía vaginal y también todo normal.

Le llegó el turno a N. y fué igual. O por lo menos casi igual. Ella tiene problemillas de endometriosis aunque últimamente está controlado. En la ecografía le encontró un pequeño quiste en uno de los ovarios pero le dijo que no se preocupara, que es pequeñito y no creía que le fuese a dar problemas.

Nos dió los papeles para que nos hiciéramos unos análisis de sangre y una radiografía con contraste, deberíamos de tenerlo hecho antes del 26 de Noviembre, que tenemos la siguiente cita. Los análisis de sangre hay que hacerlos en el segundo día de regla. Te sacan unos 4 o 5 tubitos pero no sé para qué son (debería haberlo apuntado), supongo que para ver si hay alguna enfermedad. Y también para saber tu grupo sanguíneo y RH, eso iba en un papel aparte.

A los diez días del primero de la regla te hacen la radiografía con contraste, para ver la permeabilidad de las trompas, asegurarse que no están obstruídas. Aquí que otra vez tenía que vérmelas con el "pato". Y encima no tenían del pequeño. Le dije al radiólogo que por favor lo abriese lo menos posible y me dijo que no había problema, que iría con cuidado. Parecerá una tontería pero no quiero ni acordarme de la última vez que me lo pusieron en el ginecólogo de mi pueblo. Vaya desgarros me hizo y aunque intentó varias veces me fui de allí sin poder hacerme la citologia. Bueno, a lo que iba. Con el "pato" puesto introducen una cánula y te llenan las trompas de un líquido. Me hizo las radiografías y antes de irme me dijo que todo estaba bien, que tengo las trompas totalmente permeables. Guay. Días después fue N. y todo igual, perfecto.

Ya sólo nos queda esperar al día 26 de Noviembre, que volvemos a tener cita con la ginecóloga. Estamos animadas porque de momento todo está saliendo sobre ruedas. Esperamos que siga así. También estamos contentas con el trato recibido hasta el momento, la ginecóloga nos trató muy bien, fue muy amable. Se supone que debe ser así pero por lo que he leído en otros blogs no siempre es así. Incluso ponen pegas para iniciar el tratamiento, no lo entiendo. Así que si hay chicas que pertenezcan a este hospital y quieran hacerse una inseminación, tranquilas, aquí no os pondrán pegas.

Pistoletazo de salida

Quién me iba a decir a mí que crearía un blog con lo mal que se me da escribir... en fin, ya está hecho.

No sé muy bien el motivo para aventurarme a dejar mis pensamientos por aquí, supongo que es una forma de no olvidar estos momentos que estamos viviendo, uno de los más emotivos de nuestras vidas.

Lo primero, las presentaciones.
Somos una pareja de chicas que comparten su vida desde hace más de tres años, que se conocieron por casualidad en un momento que ambas pensábamos que no encontraríamos una pareja que quisiera de la vida lo mismo que nosotras. No es porque pidiésemos mucho pero el plan "pareja tradicional" no encaja muy bien hoy en día. Asusta todo lo que huela a responsabilidad y poco individualismo. Y no les falta razón, jaja.

Desde el primer momento de conocernos, hablando y comentando, nos dejamos las cosas claras. Tan claras que nos pareció increíble haber encontrado a otra chica que pensara igual. No era plan de dejarla escapar ¿verdad? En serio, conectamos desde el primer momento. La historia de nuestros comienzos es bonita, pero la dejaremos para otro momento.

Desde el principio uno de los deseos que teníamos era ser madres. Ella porque deseaba serlo ya y le encantan los niños. Yo en cambio he aplazado demasiado mi maternidad, en parte por el trabajo y en parte por no haber encontrado una pareja adecuada para tenerlo. Ahora sí la tengo, no podría haberla encontrado mejor.

Desde hace un año más o menos entraba en internet para buscar información sobre todo el proceso médico, los temas legales y demás, y allí fue donde empecé a leer varios blogs de parejas en nuestras mismas circunstancias que nos han servido de orientación (chicas, gracias a todas por compartirlo, nos habeis ayudado bastante). En Abril nos decidimos a ir al SAS (Servicio Andaluz de Sanidad), para pedir cita con la Unidad de Fertilidad, ya que leimos que suelen tardar bastante en dar la cita. Pensamos "como tardan tanto pues la cogemos ya y que vaya pasando el tiempo". Aún no teníamos planes de boda, solo muchas ideas pero nada efectivo. En estos meses ya hemos visto restaurantes, trajes, recuerdos de boda y toda la parafernalia (ohú, que de cosas, niña...). Todo esto pensado para Mayo del año que viene, con tiempo. Pues nada, la semana pasada estábamos tan tranquilas en casa y llaman al teléfono. Un número que no me suena.

-"¿Diga?"
-"¿Fulanita de Jander Klander?"
-"Sí, soy yo"
-"Le llamo del Hospital de Valme para darle cita con la Unidad de Fertilidad"
-"¿Eing?"
-"Usted solicitó cita con la Unidad de Fertil..."
-"Si, ya, pero es que... vamos, que nos me esperaba... ¿yaaaaaaa?"
-"Sí, se ha abierto consulta para ir aligerando la espera. La cita sería el lunes a las 17:30..."
-(¡¡¡Y yo con estos pelos!!!) "Pero pensaba que tardaban más... es que es pronto..." (¿qué quieres, que me case de penalti?)
-"Podemos cambiar la cita para cuando le venga mejor. ¿Qué fecha le viene bien? Para apuntársela"
-"Pues yoooo... no sé... es que... hasta Mayo..." (madremíamadremíamadremía...)
-"Discúlpeme, tengo que atender algo urgente en el mostrador, le vuelvo a llamar dentro de cinco minutos"
-"Vale, vale, sí... hasta luego..."

Pocas veces en mi vida me han temblado las manos. Ahora me río pero que te llamen para decirte que si quieres dar el paso más importante de tu vida YA no es moco de pavo. Me voy pálida al salón, donde estaba N.

-"¿Quién era?"
-"Neni, me han llamado para... ¿Quieres ser mamá ya?"

Pegó un bote del sofá.

-"¿Qué dices...?"
-"Que me han llamado para darme cita el lunes"
-"¿El luneeeees? Pero..."
-"Yo que sé, es lo que me han dicho. ¿La cambio para más tarde?"
-"Pues no sé... si el proceso tarda tanto como dicen..."

¡¡Ring, ring!!
¡Ay, omá, que ya está ahí!

-"¿Fulanita de Jander Klander?"
-"Sí, soy yo..."
-"¿Lo ha pensado ya? ¿Lo dejamos para cuando?"
-(¡Valor y al toro!) "Pues vale, lo dejamos para el lunes"
-"Ok, pues deme los datos de su pareja, para el informe"
-"Menganita de Flower Power. Debe tenerlos usted por ahí, si está citando a más mujeres debe tener su cita. ¿Nos puede poner las dos el mismo día y hora?"
-"Pues su nombre no está aquí"
-"Pues pidió la cita un día antes que yo"
-"Bueno, de todas formas debe ir con su pareja, así van las dos. Dígame el DNI de ella"
-"Sí, el... ah, espere, que no me lo sé... Nena, toma que no me sé tu DNI..."
-"¿Hola? Sí, soy su pareja... El DNI es el bla, bla, bla..."
-"Pues confirmado, el lunes a las 17:30 en la planta baja, consulta b-10 o b-12, no lo recuerdo, pregunten por allí. Gracias, adiós"
-"Adiós, adiós..."

Nos miramos y nos salió la sonrisa tonta. ¡Que sí, que ya está en marcha! ¡Ya no queda nada! De manera instintiva nos acariciamos la barriga. "Dentro de poco habrá una personita aquí dentro, y aquí también", me dijo. Uffff... ni me lo creo. Abrazos nos hemos dado muchos: tiernos, juguetones, apasionados, de los que cortan la respiración... pero ese fue diferente. Lo sentimos diferente. No se puede explicar. Es una sensación como de haber conseguido algo que deseabas desde hace mucho tiempo mezclado con un dar y recibir amor a espuertas. Dentro de poco elevado al cuadrado.

Y poco más me queda para este primer post. Espero poder escribir y actualizar a menudo y contar como marcha todo.



P.D: Te lo dedico a tí, a mi gran amor, a la mujer que me devolvió la sonrisa y las ganas de tirar para adelante. Por como eres, por tu amor incondicional, por tu espíritu.

¡Te quiero... Mamita!