lunes, 7 de junio de 2010

Y esparando, esperando, esperando...

Esperando multiplicado por dos, esa es la crónica de hoy.

Hoy ha tocado ir al hospital otra vez para revisar cómo van los folículos de Natalia. Ya fuimos el viernes pasado y nada, aun eran pequeños. Hoy más de lo mismo, están más grandecitos pero no del todo maduros, tiene uno de 12 en el ovario derecho y dos en el izquierdo, uno de 16 y otro de 11,5. Qué bien, direis. Pues no porque la trompa izquierda es la que tiene obstruida, sólo cuentan con los que haya en el ovario derecho. También es mala lec... digo, mala suerte. Ya lleva 13 días pinchándose Puregón y los que les queda, porque el miércoles debe ir otra vez a otra revisión. Espero que el miércoles le digan que ya está alguno maduro y le den cita para la IA este viernes.

Natalia está preocupada, sabe que le va a costar un poco ser mamá biológica (mamá será seguro, lo alumbre ella o no) y encima la ginecóloga se lo ha rearfirmado. Le costará pero es jóven, tiene mucho tiempo para intentarlo y de varias maneras diferentes, no perdemos la esperanza. Si no puede ser por IA será por FIV o las demás que haya. Pero venirnos abajo ¡eso nunca!

Y yo pues nada, aquí sigo esperando para saber si sí o no. Jolines, con lo rápido que se me pasaban los días antes y ahora parece que han detenido el tiempo, oficialmente me queda una semana para la prueba. Sólo oficialmente, ji ji... Ya está comprado el pipitest, lo he guardado en el mueble del salón, donde no lo veo, para que no me dé la tentación de hacerlo antes de la cuenta. Pero es que sé que está ahí y... No, debo hacerlo bien, para bien o para mal. Esperaré.

Ayer llamó mi cuñada, que está embarazada y cumple para Agosto. El cabezón (según ella dice que es cabezoncete) ya no la deja dormir por las noches, dice que se estira y le mete los pies en las costillas y que se remueve cada vez que no le gusta la postura que ha cogido su madre. Dí que sí, exigente hasta antes de nacer, qué tío. Me ha contado que ella no empezó a notarse los síntomas de embarazo hasta las 3 semanas de la concepción, lo que me dá un poquito de esperanza. Aunque desde ahí hasta los 6 meses lo notó a base de bién, la barriga la puso malita todo ese tiempo pero ya se le pasó, menos mal. Es curioso lo malas que se ponen algunas mamás (como mi suegra, mi cuñada...) y en cambio otras (como mi madre, mi compañera de trabajo...) me cuentan que hicieron tan buenos embarazos y estaban tan bien que no les importaría estarlo otra vez. Ojalá yo salga a mi madre, ains... ¡Y que Natalia no salga a su madre en ese aspecto, pobrecita mía!

Ea, pues a esperar se dijo, no queda otra.

¡Besitos!





P.D: Diréis que soy rata pero no veais la variación de precio del test que me he comprado con el Predictor. El que he comprado se llama Acofar test y sólo cuesta 6 euros, el otro más de 20. Que sea una marca conocida no quiere decir que sea mejor y para las que debemos hacernos más de una prueba (por desgracia) no es plan de dejarse ese dinero cada vez. No recomiendo ninguna marca en especial, no conozco si alguna es mejor o peor, sólo deciros que hay opciones más baratas.

3 comentarios:

  1. Bueno ya te queda menos, esto pasa volando!!
    oye a isa le operaron por un a trompa obstruida con lamparoscopia o como se llame, pq a ella no?
    besos

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  2. Pues porque lo hemos sabido a raiz del proceso de inseminación, hace poco. No sé, supongo que si le da demasiados problemas comtemplarán la opción de operarla. O quizás la FIV, lo que resulte más cómodo.

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  3. Hola chicas como van los nervios?os vais a hacer test?el nuestro era d la misma marca(10€),aunque lo hicimos muy muy muy pronto...y Natalia como va con los folis? a ver que os contais,esperamos buenas noticias,1 saludito

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